Una introducción a la piel seca
La piel seca, médicamente conocida como xerosis, es una afección dermatológica que se manifiesta como una piel con un aspecto áspero y escamoso, que a menudo provoca picazón. Esta condición puede ser desencadenada por diversos factores, tanto de origen externo como interno. Entre los principales culpables se encuentran los elementos ambientales, las sustancias químicas y ciertos trastornos médicos de la piel. En algunos casos, la presencia de este último puede provocar el desprendimiento de las capas más externas de la piel, acompañado de intenso picor e inflamación. Curiosamente, en ciertos casos se ha demostrado incluso un engrosamiento anormal de las capas de la piel como respuesta a la sequedad.
La piel como barrera de protección
La piel seca, médicamente conocida como xerosis, es una afección dermatológica que se manifiesta como una piel con un aspecto áspero y escamoso, que a menudo provoca picazón. Esta condición puede ser desencadenada por diversos factores, tanto de origen externo como interno. Entre los principales culpables se encuentran los elementos ambientales, las sustancias químicas y ciertos trastornos médicos de la piel. En algunos casos, la presencia de este último puede provocar el desprendimiento de las capas más externas de la piel, acompañado de intenso picor e inflamación. Curiosamente, en ciertos casos se ha demostrado incluso un engrosamiento anormal de las capas de la piel como respuesta a la sequedad.
En diversas condiciones de salud como xerosis, dermatitis atópica, psoriasis y diabetes, se produce un notable debilitamiento de la barrera protectora de la piel [1]. Este compromiso también puede verse influenciado por factores externos, como las fluctuaciones en las condiciones climáticas o el proceso natural de envejecimiento.
Además de su papel como barrera a la permeabilidad, el estrato córneo de la piel está influenciado por diversos factores que afectan su funcionalidad. Un aspecto importante es el mantenimiento de la integridad de la piel mediante la activación de mecanismos de reparación. Sin embargo, para que estos procesos de reparación se lleven a cabo de manera efectiva, es crucial que exista un aumento en la producción de precursores lipídicos y filagrinas[2]. Estas sustancias se descomponen principalmente en aminoácidos, que desempeñan un papel vital en la preservación del contenido de humedad de la piel .
Mecanismos de la Piel Seca
La capacidad de la piel para ser flexible y resistente está estrechamente ligada a sus niveles de hidratación. Cuando la piel carece de humedad, puede secarse y ser más susceptible a sufrir daños. Esto ocurre a menudo cuando hay una disminución de los factores humectantes naturales, que son cruciales para mantener la hidratación de la piel. Además, ciertas mutaciones genéticas, como se observa en la enfermedad de Darier, pueden afectar la capacidad de la piel para retener la humedad al afectar su función de barrera.
Factores que provocan la sequedad de la piel
- Calor.
- Ambiente.
- Bañarse en exceso.
- Jabones que son abrasivos para la piel
- Condiciones de la piel.
- Uso de ciertos medicamentos.
- La edad.
Referencias
1. Cork MJ, Moustafa M, Danby S, et al. Skin barrier dysfunction in atopic dermatitis. In: Rawlings AV, Leyden JJ, editors. Skin Moisturization. New York: Informa Healthcare; 2009. pp. 211–240. 2nd ed.
2. Del Rosso JQ, Levin J. The clinical relevance of maintaining the functional integrity of the stratum corneum in both healthy and disease-affected skin. J Clin Aesthet Dermatol. 2011;4(9):22–42.